El domingo pasa lento y despiadado
cantando tristezas
llevando y trayendo silencios.
Frío y sin lluvia
gris distante,
solitario
(...)
las horas de rostros repetidos.
Empieza a morir la tarde
(...) desnudez del cielo.
Así son los ocasos de este cuerpo
que se extiende y se olvida de sí mismo.
Este domingo duele y ya vienen los otros domingos,
se anuncian
en mi tierra baldía.
(fragmento del poema DOMINGOS)
No hay comentarios. :
Publicar un comentario