AUTORRETRATO EN EL ESPEJO CONVEXO
En el cuadro hay un niño sonámbulo, pero no se puede
saber si camina o vuela. El movimiento de la retina
no quiere terminar el juego de lo que reposa o se alza.
El hilo de luz crea una transparencia en la mano que hace
ver su anillo. Parmigianino es capaz de refractarse.
En el cuadro hay una niña sonámbula,
pero no se puede saber si camina o vuela.
Convergencias. Fluir desde el riesgo de una mañana
anónima. Los niños entran en la cámara lúcida y se
dan la mano. Un día nos veremos al otro lado del
prisma, abriéndonos caminos en territorios lúdicos.
Habítame en ellos.
Poeta cubana de origen irlandés nacida en La Habana en 1953.
Recibió la Licenciatura en Historia y Filosofía en la Universidad de La Habana.
Decidió viajar inicialmente a Europa estableciéndose en Doublin y Zurich, para radicarse luego en forma definitiva en Estados Unidos donde obtuvo un Master en Literatura española y latinoamericana por la Universidad de San Francisco, y el Ph.D en Filosofía y Letras por Tulane University con la tesis "Entre el alef y la mandorla: poética, erótica y mística en la obra de José Angel Valente".
En la actualidad es profesora del programa de Estudios Hispánicos del Mills College de Okland, California.
Entre los premios obtenidos se destacan:
Premio Internacional Ultimo Novecento, Pisa, 1988,
Premio Internacional Riccardo Marchi-Torre dei Calafuria Italia, 1995, Mención de Honor Latino Literature Prize en Nueva York 1997, Primer Premio de Poesía Dulce María Loynaz 2002.
Es autora de «Fanaim» en 1984, «Oscuridad divina» 1987, «A veces me llamo infancia» 1985, «El tiempo es una mujer que espera» 1986, «Polvo de Angel» 1990, «Libro de los XXXIX escalones» 1995, «A las puertas del papel con amoroso fuego» en 1996, y «Autorretrato en ojo ajeno» 2001.
No hay comentarios. :
Publicar un comentario