TV
Hay tantas guerras
que estallan cotidianamente
presentadas en el horario estelar
de los noticieros de televisión.
La muerte debe abrir el apetito.
Pero en la pieza
ya no entran tantos cadáveres.
Podemos tener el honor
de ser ejecutados
antes de los comerciales.
-la sangre
aumenta la audiencia.-
El noticiero brilla como un circo romano.
Frente a las imágenes,
la pluma desgarra
y sangra el papel.
Se me
aflojan
las palabras
en esta página.
Hay un brillo
de navaja
en las miradas indiferentes,
bajo la noche indefensa
donde se ahorcan las estrellas
Hay tantas guerras
que estallan cotidianamente
presentadas en el horario estelar
de los noticieros de televisión.
La muerte debe abrir el apetito.
Pero en la pieza
ya no entran tantos cadáveres.
Podemos tener el honor
de ser ejecutados
antes de los comerciales.
-la sangre
aumenta la audiencia.-
El noticiero brilla como un circo romano.
Frente a las imágenes,
la pluma desgarra
y sangra el papel.
Se me
aflojan
las palabras
en esta página.
Hay un brillo
de navaja
en las miradas indiferentes,
bajo la noche indefensa
donde se ahorcan las estrellas
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