Diana Bellessi (Argentina, 1948)

Algún día se vuelve hoy

Mañana no seré
grande seré muerta
Eticidad y goce sellados
por falta de un futuro que
perdone cualquier error
Algo más terrible que la muerte
en nuestras manos el presente como
una esmeralda pura
Veo testas encornadas y
los cuellos que conservan
vena músculo en la huida
de los ciervos estaqueados
Nos veo
expresados en la mutilación
de lo vivo y lo salvaje
Falta de decoro vuelta
decoración. Anécdotas
de negocios despiadados
mientras plácidos toman su vermut
y criaturas selladas por el hambre
extienden sus manos
a la mesa donde brillan
la salsa de calamares
y las ciruelas. El otro no es
el enemigo dice
la leyenda desde siempre
y el yo desoye. Pasa
inapresable la hermosura:
una anciana de ojos claros
un zambo con su espléndida
melena una secuencia
de seres con la chispa del
corazón y la inteligencia

con la gracia que el yo
desea
y le aterra. Una vida
perdida en el anhelo
de la vida por temor
y por ceguera, no
seremos grandes seremos
muertos bajo cielo verde
como una esmeralda pura